El hotel es un oasis de tranquilidad, con una vista inigualable. Efrén, el dueño, te hace sentir como en casa y la comida es deliciosa, especialmente el pan artesanal. 🌅

La atención del personal fue excepcional.

La limpieza realmente dejaba mucho que desear. encontré la habitación con polvo y bastante descuidada. Además, el desayuno era muy básico y realmente no valía la pena probarlo por el precio que se cobraba. La piscina en la azotea estaba sucia y no daba ganas de meterse.

vistas espectaculares y comida deliciosa

Los chilaquiles del desayuno fueron un verdadero deleite, y la atención de Efren, quien nos dio grandes consejos sobre la ciudad, hizo que nuestra estancia fuera inolvidable. Además, disfrutar de las impresionantes vistas desde la azotea al atardecer fue un momento mágico.

Sin embargo, la habitación tenía un poco de polvo y podría haber estado más limpia. El acceso al hotel es complicado, con pendientes bastante difíciles que pueden ser un reto para algunos.

la vista de noche desde la terraza es simplemente espectacular y los chilaquiles del desayuno estaban deliciosos. el trato del personal, especialmente de efrén, me hizo sentir como en casa.

fue difícil encontrar conexión wifi rápida.

Las vistas desde la terraza son espectaculares, especialmente durante el atardecer. La atención del personal fue excepcional, haciendo que te sintieras acogido en todo momento. Disfruté de la tranquilidad del lugar y de los deliciosos chilaquiles en el desayuno.

La conexión a internet podría mejorar un poco para facilitar la comunicación con familiares.

Las vistas desde la azotea son espectaculares y realmente ofrecen un gran momento para disfrutar del atardecer en Taxco, además la decoración con juguetes y antigüedades le da un toque distintivo al lugar, aunque puede no ser del gusto de todos.

La habitación que nos ofrecieron era bastante oscura, con ventanas pequeñas y sin vista, lo que hacía que la atmósfera fuera opresiva. Además, encontramos la limpieza deficiente, con polvo acumulado y hasta una cucaracha en el piso. La piscina en la azotea estaba sucia, lejos de ser un lugar atractivo para relajarse. El desayuno es muy básico, con opciones limitadas, y cualquier extra se cobraba a precios elevados, poco acorde al costo de la estancia.

las vistas desde la terraza son impresionantes. el acceso al hotel es complicado.

Increíble! Vistas impresionantes, comida artesanal deliciosa, atención cálida y personalizada.

Vistas espectaculares y atención cálida

Estuve tres noches y debo decir que las vistas desde la azotea son absolutamente impresionantes, especialmente al atardecer. Efrén, el encargado, fue muy amable y nos dio grandes recomendaciones sobre el lugar. La cama en la habitación era cómoda, pero la limpieza podría mejorarse, ya que había un poco de polvo en algunas áreas. En general, la experiencia fue buena, aunque me gustaría que el desayuno tuviera más opciones.

La Posada Spa Antigua Casa Hogar fue una experiencia maravillosa. Disfruté del spa con masajes revigorizantes y de la deliciosa comida en el restaurante, donde probé platos auténticos mexicanos y opciones vegetarianas. La piscina al aire libre es perfecta para relajarse.

Conexión Wi-Fi algo lenta.

La habitación era bastante amplia y limpia, lo que me hizo sentir como en casa. Además, el decorado le daba un toque especial y misterioso. Sin embargo, un poco de polvo en algunas esquinas era notorio. La cama era cómoda y me ayudó a descansar bien después de un día explorando, pero el acceso puede ser un desafío por las subidas. En general, la experiencia fue buena.

La ubicación del hotel es ideal para quienes buscan vistas espectaculares de Taxco tanto de día como de noche. La atención del personal, especialmente de Efren, fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa. Sin embargo, el acceso es complicado, con subidas empinadas que pueden ser un desafío, y el desayuno era un poco limitado en variedad, aunque los chilaquiles estaban deliciosos. Valoro la tranquilidad del lugar, aunque el wifi podría mejorar.

Acceso complicado pero vistas impresionantes y comida exquisita siempre.

comida deliciosa, vistas increíbles, acceso difícil.

Una gran opción para una estancia breve en Taxco de Alarcón con una buena calidad por el dinero pagado. Pude disfrutar de unos chilaquiles riquísimos en el desayuno que valían la pena. Recomendable no llevar carro, es mejor moverse en taxi por la ciudad.